Pero cuando los fariseos oyeron esto, dijeron: «Sólo por Beelzebul, el príncipe de los demonios, expulsa éste los demonios.» Jesús conocía sus pensamientos y les dijo: «Todo reino dividido contra sí mismo se arruinará, y toda ciudad o casa dividida contra sí misma no se mantendrá en pie. Si Satanás expulsa a Satanás, está dividido contra sí mismo. ¿Cómo puede entonces mantenerse en pie su reino? Y si yo expulso los demonios por Beelzebul, ¿por quién los expulsa tu pueblo? Entonces, ellos serán sus jueces. Pero si es por el Espíritu de Dios que expulso a los demonios, entonces el reino de Dios ha llegado a vosotros. «O también, ¿cómo puede alguien entrar en casa de un hombre fuerte y llevarse sus bienes si antes no ata al hombre fuerte? Entonces puede saquear su casa. «El que no está conmigo está contra mí, y el que no recoge conmigo, desparrama.